sábado, 27 de agosto de 2011

Broken

Estoy rota. Siento que algo dentro de mi está mal, corrompido... El suelo se abre ante mis pasos y los edificios se desmoronan lentamente...
Con cada suspiro, todo va cayendo, desintegrándose. Ya no queda nada. Estoy rota. Estamos rotos los dos. Ya no queda nada de aquello que nos unía; se ha ido desvaneciendo cada instante, cada palabra, cada sentimiento. Antes éramos uno y ahora somos pedazos. Extraño esos momentos de plenitud. Necesito sentirme así nuevamente... pero no creo poder hacerlo sola, no ésta vez. Te necesito y no estás conmigo. Te llamo y no me contestas... te hablo y mis palabras se van con el viento, perdiéndose en el inmenso vacío que hay entre los dos. Ya no me queda nada más que llorar... ahogarme y desahogarme, como en un eterno sufrimiento casi teatral... morir y revivir miles de veces para continuar sintiendo éste dolor. Ya no hay pastillas que puedan calmarlo. Ya no hay tiempo que pueda hacerme olvidar lo que pasó... no creo que quede nada más que tormentos y dolor... Maldita la hora en que tuve que dar una respuesta. Maldita la hora en que te hablé. Maldita la hora en que me hiciste feliz. Maldita sea la hora en que te prendiste a mi corazón.

martes, 23 de agosto de 2011

Hurt

Cuando crees que no existe nada que pueda dolerte más... cuando la coraza que creaste a lo largo de los años no es lo suficientemente fuerte, llega otro acontecimiento, otra razón para hacer flaquear tu fortaleza... no alcanzan todos los momentos en que dijiste que no volvería a suceder, porque vuelves a caer en ese eterno abandono, en esa fragilidad que muy en el fondo mantienes, y que a pesar de intentar camuflarla sigue allí. No es suficiente el amor que intentaste acumular en tu cuerpo para lograr soportar los dolores futuros... sencillamente ese amor no era amor, no era más que un vago humo que ahora acaba de esfumarse y dejándote completamente sola, débil y sin saber qué hacer...

Tengo muchos recuerdos de dolor. Varios de desilusiones, de decepciones... pero siempre el que vendrá será más fuerte que el anterior... años intentando tapar esos huecos que han dejado las personas en mi vida, intentando creer que no han sido con maldad, que las personas cambian, que las cosas serán diferentes... y aquí estoy, ingenuamente, cayendo en la debilidad y volviendo a creer. Definitivamente no me alcanza con haber vivido momentos de dolor: no aprendo jamás! No es justo, no es justo que mi alma siempre tenga que luchar... estoy cansada.
Las veces que dejé de luchar siempre apareció alguien que me hizo trastabillar... y volver a luchar. Otra de las veces, cuando al fin tomé la decisión... prefiero no recordar como no fue respetada. Quisiera olvidar el momento en que todo se nubló y creí estar del otro lado, a salvo al fin... pero volví. Volví para seguir sufriendo. En verdad que no siempre se puede elegir... no en mi caso. Cómo quisiera irme lejos, muy lejos... donde el volver no sea una opción, donde el dolor no vuelva a ser parte de los sentimientos que me mantengan con vida, donde pueda recordar todo fríamente y donde no hayan posibilidades de caer en la trampa de la vida nuevamente...



sábado, 20 de agosto de 2011

A Ciegas

Es como si definitivamente, tuviera ganas de que saquen lo peor de mi. Hay días en los que me levanto y creo que me encanta que me hagan sufrir... no puedo ser el ser más ingenuo que hay sobre la tierra!!! No puedo creer que siga creyendo y confiando... y lo peor... cayendo...
Sin embargo, esa parte de mi naturaleza me hace más humana, o menos inhumana, dependiendo del día. Otras veces, creo que esa característica me hace especial... pero muy frágil. Demasiado. No se si pueda seguir así...
No puedo soportar tantas cosas, y finjo hacerlo... no puedo llevar adelante una vida de mentiras, pero intento seguir siendo lo más honesta posible conmigo... se muy bien que en el fondo me encantaría que todo fuera de verdad, sabiendo que la neblina que entorpece mi camino es mucho más que una simple neblina. Es voraz, acorraladora, perversa y cegadora... y aún así, intento pasar a través de ella... intento seguir el camino a ciegas, tanteando los pasos, temiendo encontrarme por el camino con un pozo sin fondo, donde caerya no va a ser el problema, sino el no poder salir jamás. Intento atravesar las dificultades pensando en que, en otro momento, recordaré ésto como un capítulo ya cerrado de mi historia... pero tengo miedo de no poder nunca recordarlo de ésta forma...
Hoy se me dificulta más que nunca pensar. Siento que todo es más difícil, y que ni siquiera mi intento de indiferencia me podrá salvar de ese final ya escrito por el destino...

jueves, 18 de agosto de 2011

Delirio

Delirar: del latín vulgar delirāre, formada del prefijo de- que indica alejamiento y lira (surco).  Delirar, comúnmente, es esa acción vieja y conocida de "salirse de la norma, de lo esteriotipado", es, en otras palabras, ver la realidad de distinta manera. Ahora... según los órigenes... ¿Quién no delira...? Desde el amor hasta el odio inclusive, nunca se ve la realidad de acuerdo a las normas... Somos capaces, por amor, de hacer cualquier cosa, de dar nuestra vida, de cambiar todo por tan sólo una palabra... somos capaces de hacer las cosas más increíbles, y muchas veces, en algunos casos, siniestras... El amor ya de por sí es loco, te enloquece cada día un poco más... es como una droga, cada vez deseas más y más, y ya no alcanza con una palabra, quieres todas las palabras... ya no deseas estar un minuto con esa persona... quieres estar toda la vida! Es un delirio constante, un alejarse de lo establecido, es experimentar, crear, innovar, cambiar constantemente... es ser hoy una persona, y cuando entras en contacto con ese otro ser que te complementa, ya te sientes diferente, cambiado, único, felíz. Es como vivir en la perfección más absoluta, tal vez el éxtasis de la vida, o tal vez una existencia renovada, delirante, loca. 
Única, diría yo. Irrepetible. Delirante.




martes, 16 de agosto de 2011

Wonderland

Hoy pensaba en mi mundo. En mi otro mundo, imaginario, claro está. Pensaba en esas creaciones fantásticas que hace uno mismo para sobrellevar la realidad... Pensaba en lo frágiles que somos para el resto del mundo, pero en lo osados que resultamos ser, al poder elegir dónde queremos vivir y cómo, cosa que no muchos pueden hacer. Si, evadir la realidad no es siempre la mejor opción... pero... ¿Acaso hay otra mejor...?
Muchas veces, lo que nos ofrece el mundo "Exterior" es tan cruel que preferimos apelar a nuestros mecanismos defensivos y lograr escapar de tanta mentira, tanto odio y engaño... Si, muchas veces pecamos de ingenuos, creyendo en la bondad de los seres "humanos", y cayendo en las más dolorosas trampas. ¿Quién no ha sufrido, por amor, ya sea de pareja, amigos, etc...?
Pienso que, somos más valientes quienes creemos que existe un mundo mejor, porque luchamos por creer en él. Porque no aceptamos la crueldad como modo de vida, porque todos los días nos levantamos y seguimos luchando. Porque caemos, y caemos, pero siempre nos levantamos con el corazón roto, juntamos los pedazos y estamos listos para volver a empezar. Porque creemos en lo bueno de las personas... les vemos el lado positivo, o lo buscamos, o muchas veces lo inventamos... pero NO, no nos rendimos. Esa palabra no existe en nuestro diccionario. Es más fácil luchar que creer en la hipocresía. Somos capaces de seguir adelante, e intentar cambiar la óptica de las personas... 
Porque, a pesar de todo, seguimos de pie...

domingo, 14 de agosto de 2011

Momentos...

Quisiera guardar en mi memoria ciertos momentos para siempre. Deseo que sean eternos, que gobiernen mi recuerdo hasta que mi alma ya no sea capaz de estar en éste cuerpo.
No puedo parar de pensar en esos momentos tan mágicos que ocurrieron en mi vida desde que llegaste a ella. Desde que en realidad tengo vida... A partir de ese día podría considerar lo que antes tenía como "vida" y no sólo como el mero transcurso del tiempo en torno a casualidades universales que nada tenían que ver con MIS momentos. Si, casualidades. Eso era antes... eran tan solo cosas que ocurrían, sólo pasaban y así transcurrían los días. Los navegaba lentamente, como llevada por una simple brisa, no estaba buscando el viento adecuado para cambiar de recorrido, para conocer otros trayectos. Sólo dejaba que la semi-vida me pasara... y deseaba que fuera más rápido, hasta salteaba los momentos en que mi barco tenía que anclar... así no perdía tiempo. Sólo recorría... sólo viajaba de un lado al otro en un continuo sinsentido. Ahora entiendo porqué estaba tan perdida. Tan ciega. Creía ir por la ruta correcta... pero claro, no me había percatado que al conocerte, mi rumbo cobraría sentido... ya no pasearía por las aguas como si no me importara... ahora miraría cada detalle, cada sombra, cada momento. Lo guardaría, atesoraría ese momento por siempre, y lucharía para no perderlo. Si, ahora sí es vida. Es más que vida. No me alcanzará ni ésta sucesión de días, años, que me quedan por delante... voy a empeñar unas cuantas vidas más, así cada momento será eterno. El eterno retorno... quiero vivirlo por siempre... ésta vez si.

sábado, 13 de agosto de 2011

Veneno


No quiero arriesgarme a pensar en nada. Es más... solo quiero dejarme llevar... dejarme ir... no quiero evitar ningún pensamiento, ni callar mis voces internas. Sólo quiero dejar fluir lo que hoy siento, dejar salir todo lo que deseo y darle rienda suelta a mis sentidos... Se que tal vez no sea suficiente con dejar ser todo ésto, pero también se que si sigo callando mi interior en algún momento pujará tanto por salir ésto que siento, que saldrá de forma abrupta, fuerte, irreprimible... y es allí donde no sabré que hacer...
Quisiera que fuera tan fácil como dejarme ir, apelar a lo más primitivo e instintivo de mi ser y no dudar más. No aferrarme a nada. No necesitar aferrarme a nada... detesto eso. Odio tener que atarme a algo para sobrevivir unas horas más. Para calmar el dolor por un rato. Para poder vivir un poquito más con la falsa sensación de paz, que es peor que mil horas de agonía. Es tan insoportable, tan agudo el dolor que no soy capaz de soportarlo fingiendo que no está allí. Lo siento de todos modos... es más... aparece, cuando mi guardia está más baja, cuando menos lo espero... El peso de mis palabras cae sobre mi. Quiero dejarlas salir, aunque sepa que, en éste momento, mis palabras son más que un veneno...

domingo, 7 de agosto de 2011

Miedo...


El miedo me desgarra el alma. Siento como lentamente va disolviendo cada parte de mi ser, convirtiéndome en polvo. Sólo en polvo... El frío dolor se cuela entre mis huesos, haciéndome dudar si aún estoy viva...me siento frágil... como una muñeca de porcelana, que cualquiera puede romper, y que hasta el más suave viento puede destruir en tan solo una fracción de segundo.
Tu silencio me condena, me nubla, me hace desaparecer... no se dónde estoy. Ya no se nada acerca de mi, ni de ti... pareciera algo tan lejano... como si fueran cientos y cientos de vidas transcurridas en silencio. Como animales acechando. Como buitres, aprovechando el momento. Como gatos salvajes por avalanzarse a su presa... como la muerte buscando su próxima víctima.